Esta perra ha sido maltratada en el pasado: ahora tiembla y hace pipí por miedo apenas siente una voz humana
Tantos animales, entre los cuales muchísimos perros, experimentan sobre la propia piel grandes injusticias y sufrimientos, a menudo por mano del hombre, que inevitablemente, terminan por hacerlos temerosos y asustadizos. Un perro puede quedar traumatizado por mucho tiempo si es tratado mal por el propio patrón o de la propia familia. Esta perra, por ejemplo, ha recibido uno de los peores tratamientos desde siempre por la propia "familia", al final, se ha encontrado al seguro en un refugio, pero extremadamente aterrada de la presencia humana.
via Facebook / Dallas Dog – Rescue.Rehab.Reform
Facebook / Dallas Dog – Rescue.Rehab.Reform
La pobre perra se llama Gia y cuando ha llegado a un refugio de Texas, los voluntarios de inmediato se dieron cuenta que algo andaba mal. La pequeña perra estaba tan asustada que se acurrucaba con la cabeza dirigida a un ángulo y con tan solo el sonido de las palabras de un ser humano, o al contacto, temblaba y se hacía pipí por el miedo. En el video, que es el refugio ha compartido sobre la página de Facebook, se ve claramente a la pobre Gia temblar muy fuerte del susto. Quién sabe que terribles traumas debe haber sufrido para tener una reacción semejante a las caricias de una de las voluntarias.
Facebook / Dallas Dog – Rescue.Rehab.Reform
Afortunadamente, la asociación a favor de los animales DallasDogRRR, que se ocupa de recuperaciones difíciles, ha intervenido y gracias a tanto amor y un poco de paciencia, ha logrado mejorar las condiciones de Gia. Los progresos de la perrita están en contínuo aumento, pero está todavía muy lejos de poner la nariz fuera del refugio y encontrar otros seres humanos. Por ahora, cuando siente voces humanas se esconde bajo la cama, pero al menos ha dejado de hacerse pipí.
Facebook / Dallas Dog – Rescue.Rehab.Reform
Incluso, el comportamiento de Gia frente a otros animales es totalmente diferente: ama jugar con sus semejantes en el refugio y correr de una parte a la otra, sabe que sus amigos de cuatro patas no le harán mal de ningún modo.
Para hacerle perder a Gia el miedo a los humanos, la asociación ha decidido de llevarla a una casa de recepción temporal, con un especialista, donde vivirá por poco tiempo y aprenderá que, finalmente, está segura y que ninguno le hará mal.
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Esperamos que esta perra encuentra un poco de confianza en los seres humanos y que pueda continuar su vida rodeada del amor de una familia afectuosa.
