Un perro transcurrió meses debajo de la lluvia aferrándose a su peluche, luego alguien intervino
Los perros son animales puros y fieles, que aman incondicionalmente a sus dueños y a los demás seres vivos: no distinguen raza, color o especie y aceptan a todos como amigos. Son también muy dulces y mimosos, de hecho, demuestran su cariño incluso con peluches. Para ellos, un peluche es como un compañero de juegos, un confidente o un apoyo emocional.
La historia que estamos por contarles representa el emblema de la ternura que puede suscitar un perro callejero que hace todo lo posible para proteger a su amigo inanimado como si fuera su cachorro o su mejor amigo. Pero comencemos por orden.
via People
Como acabamos de mencionar, un ejemplo de este amor lo ha mostrado Nikki, un dulce ejemplar hembra de pastor alemán sorprendida en la calle mientras deambulaba bajo la lluvia intentando proteger a su adorable peluche.Las fotos y los videos del perro que, entre las calles azotadas por la lluvia incesante, sostenía firmemente entre sus fauces a su amado peluche, tocaron profundamente el corazón de cientos de personas. Esto llevó a una asociación de voluntarios dedicada a los animales a asumir la responsabilidad de localizarlo y salvarlo.
La misión para salvar a Nikki tomó impulso cuando las imágenes de la perra comenzaron a circular entre los rescatistas en la zona metropolitana de Detroit, en los Estados Unidos. "Recibí varias indicaciones con fotos y videos de este perro que caminaba bajo la lluvia en el centro de Detroit, con su peluche. Fue una escena desgarradora", contó Gail Montgomery, cofundadora de Almost Home Animal Rescue League.
Así comenzó la carrera para encontrarla, una carrera que al final tuvo éxito: la perra estuvo durante meses sola en la calle, probablemente debido al fallecimiento de su dueño y se alimentaba de sobras y gracias a la ayuda de personas generosas. El peluche quizás era el último recuerdo de su vieja familia y no quería dejarlo ir. Después de haber sido salvada, Nikki fue llevada al veterinario, el cual descubrió que la perra sufre de algunos problemas por el hecho de haber estado durante meses en la calle.
"Encontré bolsas de plástico, ramitas y huesos en su estómago", explico Montgomery. Hoy en día, afortunadamente Nikki y su peluche preferido finalmente encontraron alojamiento en un hogar cálido y seco: el pastor alemán fue adoptado por una familia que la cuida y sigue recibiendo los cuidados necesarios.