Concejal se niega a llamar a su colega de color "doctora" en una reunión de trabajo y es despedido
Un concejo municipal en Carolina del Norte despidió al concejal de planificación de la ciudad Tony Collins, un hombre de piel blanca, que se negó a utilizar el apodo de "doctora" cada vez que debía dirigirse a una mujer negra presente en la reunión de la comisión. De poco sirvieron las continuas correcciones por parte de la mujer, Carrie Rosario, reiteradas veces durante la larga reunión que tuvo lugar por la plataforma Zoom. "Llámeme Doctora Rosario, por favor", pero el funcionario público continuaba llamándola "Señora Rosario" incluso después de que la mujer tomara nota. ¿Cuál es el problema? Quizás, nos encontramos aún una vez más frente a un caso de racismo y de sexismo que, correctamente, fue castigado. De lo contrario, ¿por cuál motivo el señor Collins se habría negado tan tercamente frente a una solicitud tan simple?
via Indipendent
Carrie Rosario tiene un doctorado y es profesora asociada en la Universidad del Norte de Carolina, en Greensboro. Durante el largo encuentro en Zoom con varios concejales municipales, la Doctora Rosario planteó algunas inquietudes sobre un proyecto de construcción en su área, cerca de su casa. Es en este contexto que un primer comisionado municipal la llamó por error con el título equivocado y rápidamente se disculpó con ella, apenas la mujer se lo hizo notar. Sin embargo, poco después, el concejal de planificación de la ciudad, Tony Collins, comenzó a referirse a ella con el apodo de "Señora Rosario". El hombre siguió refiriéndose a ella de esa manera incluso después de que ella se lo hizo notar varias veces: "Por favor, llámeme con mi título, Doctora Rosario". "Yo leo que su nombre es Carrie Rosario, entonces la llamaré así", en ese momento, fue evidente que el funcionario Tony Collins le estaba deliberadamente faltando el respecto a la mujer.
La Doctora Rosario, por su parte, se sintió muy frustrada por el intercambio sucedido con el comisionado Collins, a pesar de que le había hecho una solicitud simple y más que legítima. El orgullo de Tony Collins, aparentemente, ha prevalecido sobre el hombre, motivo por el cual el Concejo Municipal de Greensboro decidió despedirlo de su rol de concejal.
Una victoria merecida, por tanto, la de la Doctora Rosario, la cual sudó y luchó como todos para conseguir su título. ¿Por cuál motivo alguien debería denigrarla así?
