Las abejas rodean un automóvil por dos días: la abeja reina se había quedado atrapada en el interior
Cuando se habla de reinas y caballeros, se dá por descontada la lealtad de éstos últimos ha su soberana. El lema del reino es "¡defender a la reina bajo cualquier costo!" y es exactamente lo que debieron haber pensado la abejas de una colonia cuando han visto a su abeja reina desaparecer dentro de un auto. El secuestro inconsciente, de la mano de Carol Howarth, una abuela inglesa de 68 años, sucedió luego que la señora visitó un espacio naturalista. Cuando se detuvo en Haverfordwest, en Gales, se dió cuenta de haber atraído a miles de abejas en la parte trassera de su auto.
via CNN
Carol no se habia dado cuenta que una abeja reina se había refugiado por equivocación en su Mitsubishi Outlander y que se había quedado allí durante 2 días. La sospecha comenzó cuando notó a cientos de abejas se concentraban cerca de la luz trasera de su auto. ¡La señora no se imaginaba de haber encarcelado por equivocación a su abeja reina!
Tom Moses, un guardabosques de Pembrokeshire Coast National Park, se encontraba de paso por esos lados cuando ha interceptado a las abejas sobre el auto de Carol Howarth. El guardabosques ha tomado rápidamente una foto de lo sucedido, publicándola en Facebook, y luego llamó a los apicultores para que vinieran en ayuda de las pobres pequeñas bestias. Con solo pensar de que alguna persona que pasara por allí le hubiera tirado agua tratando de eliminarlas, lo asustaba: las abejas son muy importantes para nuestro Planeta y hay que cuidarlas.
Al final, con un poco de paciencia y con la ayuda de una caja de cartón, la abejas se alejaron de la Mitsubishi de la señora Carol, a pesar de haber necesitado un segundo intento: el día después de este mal episodio, ¡Carol se encontró nuevamente invadida por abejas! Nadie logró interceptar a la abeja reina que, probablemente, se había quedado escondida en el auto, quien sabe donde, quizás atraída por algun resto de comida dulce o simplemente...¡por el olor del gato de Carol!
De cualquier manera, las abejas han sido alejadas definitivamente y llevadas a salvo. ¡Ahora Carol puede manejar tranquila!
