Se burlaban de ella porque estaba afectada de una rara forma de enanismo: hoy enseña a los niños a aceptar la diversidad

por Patricia Zorzenon

16 Febrero 2020

Se burlaban de ella porque estaba afectada de una rara forma de enanismo: hoy enseña a los niños a aceptar la diversidad
Advertisement

La vida no es fácil para ninguno, ni siquiera para quien parece haber nacido más afortunado. Incluso es innegable el hecho que algunas personas hayan tenido que luchar mucho más para ser aceptadas por la sociedad, de la propia familia y en muchos casos, incluso de sí mismos. La verdad es que nacemos y morimos todos del mismo idéntico modo y al mismo tiempo, vivimos lo mejor que se puede, buscando de mantenernos a flote y buscando de luchar contra las injusticias que la vida nos presenta. Somos todos iguales, incluso quien nace con alguna forma de discapacidad se cansa aún más que otros en encontrar el propio lugar en el mundo y en ser aceptado al 100%. Esta es la historia de Megan Grannan, una mujer de 26 años, nacida con una rarísima forma de enanismo que la hace parecer a una niña de 4 años.

via Dailymail

Advertisement

MEET MEGAN GRANNAN. My name is Megan Grannan! I am 26. I have a rare form dwarfism called Metatropic Dysplasia. My...

Pubblicato da Women Without Borders su Venerdì 2 agosto 2019

Megan es una joven que no ha crecido jamás físicamente, a causa de la grave enfermedad de la cual está afectada: su tórax ha quedado como aquel de una niña de 5 años, mientras sus articulaciones son más largas. Su vida no ha sido para nada fácil, los médicos le dijeron a su madre que sus espectativas de vida eran muy bajas y que no habría superado seguramente los 5 años; además, desde niña se ha tenido que rodear con gente que sin medios términos la definía "estúpida" y poco atractiva. Los comentarios crueles y las contínuas humillaciones públicas han tenido un impacto todavía más doloroso de su efectiva condición física. Hoy, sin embargo, aquella niña ha tenido su parte de revancha y tiene la fuerza para poderlo contar al mundo. Contra cada expectativa, Megan no solo ha crecido, sino que ha estudiado y se convirtió en una joven maestra de la primaria.

Advertisement
Twitter / Megan Grannan

Twitter / Megan Grannan

Después de haberse graduado, Megan ha decidido de ser una maestra. Una elección valiente, que la mujer ha elegido para desafiar cada barrera y enseñar a los niños a aceptar y recibir "al diferente". Obviamente, no le importa que sus alumnos sean más altos que ella.

Megan habría querido aprender mucho antes y aceptar su diversidad y ahora espera de poder ayudar a futuras generaciones. Aceptarse a sí misma y a los otros es el primer paso para construir un mundo gentil y justo.

Advertisement