Ninguno se levanta para ceder el lugar a la mujer embarazada: el marido la hace sentar sobre su espalda

por Patricia Zorzenon

11 Diciembre 2019

Ninguno se levanta para ceder el lugar a la mujer embarazada: el marido la hace sentar sobre su espalda
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La buena educación y un mínimo de civilización nos obliga a ceder el lugar en el autobús al más anciano, a quién está cansado y a las mujeres embarazados. El mismo discurso sería también si nos encontráramos en cualquier lugar público. No se necesita un diploma para entender que se trata de un gesto gentil y necesario. Incluso, diferentes personas al día de hoy no se dan ni siquiera cuenta y preferirían estar en la casa más que ceder su lugar. Obviamente, "todo el mundo es país" - incluso en China suceden episodios parecidos pero, por suerte, hay quien todavía logra dar una lección moral a todos los jóvenes (y no tanto) ya atrapados de verdadera y mucha indiferencia hacia el prójimo.

via Dailymail

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Youtube / South China Morning Post

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En China, la policía de Hegang, una ciudad en la provincia de Heilongjiang, ha compartido un video que ha tocado el corazón de millones de usuarios. Un marido se ha transformado en "silla humana" para poder hacer sentar a la mujer embarazada en una sala de espera del hospital. Ninguno de los presentes se ha levantado para hacer sentar a la mujer embarazada, cansada y demostrando una larga espera ante la visita en el hospital. En el video difundido por la policía se ve al hombre sentarse en el piso para poder sostener a la mujer con la espalda. Un video que si tuviera un título sería seguro "indiferencia": muchos de los presentes de hecho han quedado mirando el propio teléfono, como si nada pasara.

Entre los varios comentarios del video se encuentran elogios y felicitaciones al "buen marido" e incluso uno que dice: "me siento avergonzado de mi mismo mientras miraba a aquel hombre sentado. A mi mujer no la he tratado tan bien cuando estaba embarazada"

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Youtube / South China Morning Post

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Una lección de civilización que si se espera, puede abrir los ojos a todas aquellas personas que hasta ayer preferían quedar fijadas en el propio celular.

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