Un joven inventa "El agua que se come" para ayudar a los pacientes ancianos a estar hidratados

por Patricia Zorzenon

21 Agosto 2018

Un joven inventa "El agua que se come" para ayudar a los pacientes ancianos a estar hidratados
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Las personas ancianas y en mayor razon aquellas que sufren de formas de demencia, pueden ir encontrando riesgos para la propia salud solo por el hecho de no beber lo suficiente. Cuando se esta en edad avanzada, viene perdida casi completamente el sentido de la sed y es facil provocar una grave deshidratacion del cuerpo. Ademas, muchas personas enfermas de demencia, encuentran gran dificultad en tragar los liquidos, complicando posteriormente los tentativos de hidratacion.

Un joven, nieto de una señora con una leve forma de demencia senil, ha ideado un plan para permitir que su abuela y todas las demás personas bebieran lo suficiente, sin ningún esfuerzo.

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Twitter/john thackara

Twitter/john thackara

Lewis Hornby, luego de haber observado a la abuela incurrir a una internacion hospitalaria por una grave deshidratacion, ha decidido de pensar en alguna cosa que puediera evitarle de nuevo este inconveniente. La abuela, como ocurre a muchos ancianos, sufre de una leve demensia que le hace olvidar completamente de beber, ademas del hecho que no percibe la necesidad de beber y que encuentra dificil deglutir los liquidos. Un cuadro complicado, pero para nada raro.

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 Vimeo/Lewis Hornby

Vimeo/Lewis Hornby

Aquello a lo que ha llegado el joven Lewis son unas pelotitas de colores hechas del 90% de agua y el resto de la parte de gelatina y electrolitros para aumentar el efecto hidratante.

Las pelotitas resultan ser solidas, tienen un color luminoso que llama facilmente la atencion de las personas y no dejan residuos sobre las manos.

Lewis ha conseguido la caja que contiene las pelotitas de una apertura facil de abrir, pensada propio para quien tiene una reducida capacidad manual y de una tapa transparente en modo que la atencion es frecuentemente recogida por las gelatinas.

"Mi abuela ha comido 7 gelatinas en 10 minutos, el equivalente de un vaso de agua que habria necesitado horas y la asistencia de alguien".

"Mi abuela ha comido 7 gelatinas en 10 minutos, el equivalente de un vaso de agua que habria necesitado horas y la asistencia de alguien".

Vimeo/Lewis Hornby

Un modo muy simple- pero tambien eficaz- para evitar a las personas ancianas de complicar posteriormente el propio estado de salud por un simple olvido.

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