La verdad está en pie por sí sola, la mentira se admite sólo si encuentra los cómplices

por Patricia Zorzenon

08 Marzo 2019

La verdad está en pie por sí sola, la mentira se admite sólo si encuentra los cómplices
Advertisement

Mientras quieres decir traicionar sea a los demás que a nosotros mismos, decir la verdad nos libera, nos ayuda a convivir y a aprender de nuestros errores. Ninguno es infalible y todos tienen el derecho de equivocarse, lo importante es admitirlo, aceptar las propias responsabilidades, sin coartada o excusas que antes parecía que nos hacen sentir mejor, pero a largo andar nos desgastan. Las mentiras parecen senderos fáciles y derechos, pero que llevan inevitablemente a un vehículo ciego.

Advertisement
unsplash

unsplash

La verdad esta en pie por sí sola, la mentira tiene necesidad de "sostenerse" pero es solo cuestion de tiempo porque termina con caer todo bajo su mismo peso. A veces puede ser doloroso afrontar la realidad, decir las cosas como estan o sentirlas decir, pero se trata de un pequeño precio de pagar por una vida mas serena y ligera. Detras de una mentira hay siempre una cosa sin resolver que se arrastra por largo tiempo, perdiendo piezas a lo largo del camino y haciendonos desaparecer aquella justa.

La verdad es armonía y equilibrio, permite de perdonarse a si mismos y a los demás, asi que se pueda proseguir el viaje sin arrepentimientos o culpas. Cuando decimos lo falso, cuando no somos coherentes con nuestras acciones, con nuestros valores, todo esto continua a perseguirnos cargando el presente con nuestro pasado. No cuenta el tiempo, antes o despues, en una manero u otra, si no cerramos la cuenta nos vendrá presentado en el futuro.

La sinceridad es un dote, un don, una calidad de la cual estar orgullosos. La mentira es una mascara que debemos recordarnos de poner cada dia, hasta hacernos olvidar nuestra verdadera cara. Pocas cosas saben ser seductoras como las mentiras, pero nada es comparable a la sensacion de paz que solo la verdad sabe dar.

Advertisement
Unsplash

Unsplash

Cualquiera puede decir una mentira, pero solo quien tiene de verdad coraje sabe ser sincero hasta el fondo. Saberlo nos hace sentir satisfechos de nosotros mismos, da valores a quello que somos,  quello que nos han enseñado y nos hace mejores. La mentira es como una criatura que tiene necesidad de ser continuamente alimentada, hasta secarnos del todo.

La verdad es aquella misma nutriente para el alma, haciendonos obtener un aspecto diferente tambien a los ojos de los demas. Ofrecer al projimo la misma honestidad con la cual queremos ser tratados no quiere decir lanzar una piedra en un estanque, convirtiendo parte de una onda siempre mas grande.

Advertisement