Tener un perro es el regalo mas bello que podemos hacernos a nosotros mismos y a nuestra familia

por Patricia Zorzenon

21 Febrero 2019

Tener un perro es el regalo mas bello que podemos hacernos a nosotros mismos y a nuestra familia
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Usando la frase del famoso proverbio se podria decir que quien encuentra un amigo "de 4 patas", encuentra un tesoro. Quien tiene o ha tenido un perro en la propia vida no cambiaría todo el oro del mundo por los momentos que estas extraordinarias criaturas le regalan y le dan. Son capaces de darnos amor incondicional, pueden entenderse entre sí con una sola mirada y conocer nuestro estado de ánimo mejor que nosotros mismos. Somos todos su mundo, nos hacen sentir únicos y especiales, llenan nuestra vida de alegría y logran hacernos sonreír de nuevo incluso en momentos tristes.

via akc.org

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Por cuanto podamos domesticar un perro, tambien èl con su modo de ser tierno y jugueton termina por "domesticarnos a nosotros". Imaginando por un momento de estar en la cabecita peluda de nuestro fiel compañero de aventuras, esto es lo que se diria si pudiera dictar "sus reglas" de convivencia:

  • Nunca me encierres solo en una habitación
  • Déjame salir cada vez que te lo pida, incluso si acabo de volver.
  • Si algo cae al suelo es mío.
  • Renuncia a no volver a estar solo cuando vayas al baño
  • No me digas que deje de ladrar, si lo hago, siempre hay una razón.
  • Tienes que dejarme probar todo lo que comes.
  • Ríndete, dormiré en cualquier lugar de la casa, especialmente donde no quieras
  • Nunca dejarás una habitación sin mí.

 

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Tener un animal domestico, que se trate de un gato, de un perro u otro, es seguramente una responsabilidad, requiere atencion, costos, algun sacrificio y ser un poco menos "libres". Todas esto sin embargo, son de verdad pequeñas renuncias frente a la riqueza emocional, al amor, al consuelo, a la serenidad y a la felicidad que nuestros amigos de 4 patas saben donarnos. Todas las vacaciones postergadas, el dinero gastado, los sillones mordidos y los muebles rotos no valen la belleza de recibir una fecto tan grande. 

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