Según un estudio japonés, no hay nada de malo en tratar al perro como un miembro de la familia

por Patricia Zorzenon

27 Noviembre 2018

Según un estudio japonés, no hay nada de malo en tratar al perro como un miembro de la familia
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Los perros tienen un fuertisimo poder de atraccion por los humanos, un poder al cual casi ninguno logra a resistir. Si encontramos un cachorro por la calle, dificilmente logramos a resistir a la tentacion de acariciarlo y mimarlo, como si estuvieramos empujados por alguna fuerza interior. 

Para quien vive con un perro en casa, esta union se convierte a menudo tan fuerte de ser insustituible y comparada a la union que se tiene con los hijos. En fin, si todo aquello les parece una exageracion, la ciencia explica que no lo es asi de tanto. Y la razon esta en la quimica de nuestro cerebro.

via telegraph.co.uk

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U.S. Air Force photo by Airman 1st Class Isaiah J. Soliz/Released

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Un estudio, realizado por el Departamento de Ciencias Animales de la Universidad de Azabu en Japon, ha analizado los efectos sobre el cerebro que deriban de la relacion hombre-perro. En particular si es analizada la produccion de oxitocina, una particular hormona que juega un rol claven en definir las relaciones sociales entre humanos.

Esta hormona es responsable en particular de la creacion del sentimiento de proteccion y amor incondicional que un padre prueba por un hijo y viene estimulado cuando los dos se miran a los ojos.

Los investigadores han revelado que la produccion de la misma hormona aumenta incluso cuando un hombre mira a los ojos a su perro. Entre otras cosas, aquello sucede incluso en el cerebro del perro mismo.

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parkvanness.com

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A nivel quimico, entonces, aquel sentimiento de amor y proteccion hacia nuestro amigo a 4 patas paree ser del todo justificable. Segun los investigadores, en los siglos siguientes al domesticarlos, los perros parecen haber "aprendido" a ser atrapados sobre si mismos algunas de las atenciones que nosotros reservmos a los hijos. Lo podemos notar por algunos comportamientos que tienen: si damos por ejemplo a un perro una tarea imposible, èl instintivamente se girara hacia su humano con aire de interrogacion, exactamente como haria un niño hacia un padre.

La proxima vez que se encuentren hablando con vuestro perro y alguno les haga notar que estan exagerando, tendran una explicacion plausible de dar!

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